Todos tenemos algún motivo para estar preocupados, para sentirnos inseguros, para quejarnos, para criticar a los demás… Sin embargo hay personas que parecen estar siempre de buen humor y otras que ven la vida de una forma negativa y transmiten amargura.
Nuestra forma de expresarnos influye en nuestro entorno y no somos conscientes de la influencia que podemos llegar a ejercer en los demás.
Hoy en la sección de comunicación no verbal de Para Todos La 2, hemos visto cómo se transmite la energía positiva, cómo podemos contagiarla, para que, mostrándonos de una forma abierta, los demás nos correspondan.
Pero también nos hemos planteado qué pasa si no tenemos motivos para estar alegres o no tenemos ganas de hablar con los demás, ¿es normal que nos mostremos tal como estamos en este momento?