Las muñecas tienen un papel relevante en el ritual de seducción, especialmente para las mujeres, que utilizan esta reducida zona del cuerpo para realizar movimientos que van de la timidez a la más intensa sensualidad.
No es extraño que la gesticulación femenina muestre con frecuencia las manos caídas, exhiba la fina piel del antebrazo interior o adopte unos movimiento dulces y ondulados. Porque las muñecas femeninas tienen en general más flexibilidad y son menos robustas que las de los hombres.
Como en el ritual de seducción se tiende a acentuar las características diferenciadoras de cada sexo, el movimiento de muñecas toma un papel protagonista. No todas las mujeres son conscientes de los mensajes que envían pero la mayoría dominan distintos registros de forma inconsciente. Así, una misma mujer puede expresarse de manera distinta según la circunstancia y adoptar, por ejemplo, una gesticulación de manos fuertes y firme en un entorno profesional.
[button link=»https://youtu.be/PJT-d6fehXg» size=»large» target=»_blank» icon=»» color=»alternative-1″ lightbox=»false»]Puedes ver ejemplos en el vídeo del programa A punto con la 2 de TVE (4/4/16).[/button]
